Agradecimientos

Que sirva de homenaje estas palabras para todos los que colaboraron desinteresadamente. Especialmente la encargada del supermercado Jespa y el somalí que recogía chatarra. Ambos me demostraron que todo es posible si encuentras a las personas adecuadas para llevar a cabo aquello que te propongas. Recuerdo especialmente dos momentos en los que me di cuenta de la suerte que había tenido de cruzarme con ellos en el camino. El primer momento fue estando en el metro cuando recibí la llamada que significaba la aprobación para grabar dentro del supermercado, algo fundamental para el cortometraje y que no fue tan sencillo como parecía. El segundo momento fue cuando estando recogiendo chatarra con el somalí... me dijo: "La vida es menos difícil cuando nos ayudamos un poco los unos a los otros". Espero que un día me llames y pueda hacerte la tuya menos difícil.

En el medio de estas dos personas están otras dos personas igualmente importantes. Fernando Contreras y Javier Ferreiro. Ambos resultaron providenciales para el desarrollo del proyecto. En mi recuerdo estará siempre la reunión en la que nos dieron las dos y las tres y las cuatro... pensando en el timing del proyecto, los planos necesarios, en la historia, etc. O la quedada donde Fernando se sacó,-de esa manga tan grande que tiene-, la estructura de plástico con la que grabaríamos cada uno de los planos y que aguantaría todo lo que quisimos y más. Alrededor de estas dos personas estan otras tres más que colaboraron y me ayudaron en el momento que más se necesitaba, como Iñaki y Sergio, que haciendo uso de su don de gentes nos trajeron en un momento "extras" de diferentes países y de diferentes edades para hacer el botellón más improvisado y surrealista en el que he participado. O como Juan que me acompañó para grabar planos esenciales para que la historia quedara terminada. Y alrededor de estos tres están todos los demás a los que sólo puedo darles las gracias por formar parte de este proyecto cuando se les llamó.

Keep thinking...